FORO JAVERIANO

Tatiana Calderón Noguera nació el 10 de marzo de 1993 en Bogotá, Colombia. A los 9 años montó karts por primera vez, y a partir de ahí empezó ha competir en el deporte. Empezó participando en Estados Unidos y a los 16 años ya estaba corriendo en Europa. En el 2018 fue contratada por Sauber como piloto de desarrollo de Fórmula 1 y un año después disputó en Formula 2 como piloto titular del equipo BWT Arden, siendo la primera mujer en participar en dicha competición. Recientemente corrió las 24 Horas de Daytona y, cumple su segundo año corriendo en la Super Fórmula Japonesa.  

 

Foro Javeriano: ¿Cómo te describirías? 

Tatiana Calderón: Soy amante de los deportes, apasionada por lo que hago, muy competitiva y perfeccionista. 

 

FJ: ¿Cómo fue tu primer acercamiento al automovilismo? 

TC: Mi hermana Paula me llevó a una pista de alquiler de karts que había cerca de nuestra casa en Bogotá. Compramos un turno de 5 minutos y me enamoré de la velocidad y de la adrenalina. Desde ese día mi pasión por este deporte crece cada vez más. 

 

FJ: ¿Cuándo decidiste dedicarte al automovilismo y cómo se lo contaste a tus papás? 

TC: La verdad yo siempre lo tuve muy claro desde que tenía 9 años, de que quería dedicarme a las carreras y llegar a la F1 donde estaba Juan Pablo Montoya. Fue más convencer a mis papas de que me dieran la oportunidad de dedicarme solo a las carreras. Creo que realmente se convencieron cuando gané un campeonato de karts muy importante en Estados Unidos, cuando se dieron cuenta de que podíamos ir “en serio” para hacerme profesional en el automovilismo. 

 

FJ: ¿Cuál ha sido el momento más feliz y el momento más difícil de tu carrera? 

TC: El más feliz, sin duda, la primera vez que me monte a un Formula 1 en 2018 en México, porque había soñado más de 15 años con ese momento. El más difícil fue perder a mi compañero de equipo Anthoine Hubert durante una de mis competencias en la Formula 2, en 2019 en Spa Francorchamps. 

 

FJ: ¿Cuál ha sido tu campeonato favorito? 

TC: Me gustan todo tipo de competiciones y sobre todo si puedo competir en estas. Pero sin duda creo que mi favorita es la F1 y la Indycar en monoplazas. 

 

FJ: ¿Aspiras competir en Fórmula 1? 

TC: Si, es mi sueño y objetivo. 

 

FJ: ¿Cómo llegaste a la Súper Fórmula Japonesa? 

TC: Fue todo a último minuto; nos habíamos quedado sin asiento y sin el patrocinio necesario para seguir compitiendo en la Formula 2. Casi que el 24 de diciembre llegó uno de mis ángeles: Rokit group; y se dieron las cosas para poder competir en esta competitiva categoría. Es el carro mas cercano a F1 actualmente y un campeonato con muchísimo nivel; es un honor poder representar a Colombia y a las mujeres en la máxima categoría del automovilismo en Japón y ser la primera mujer en la historia en competir en él. 

 

FJ: Aparte del mundo del automovilismo, ¿Qué otros hobbies o actividades te gusta hacer? 

TC: Me encanta jugar tenis o hacer ski acuático. Uno de mis placeres es tomarme un buen café colombiano en todos los países a los que voy. 

 

FJ: ¿Cómo es un día en la vida de Tatiana Calderón? 

TC: Me levanto a hacer ejercicio temprano, correr por el parque y antes de volver a mi casa paro a tomarme un buen café. Después desayuno y sigo entrenando en el simulador, pesas y estiramientos. Luego en la tarde hago entrevistas y trabajo de redes sociales, emails, reuniones. También veo a un psicólogo deportivo una vez a la semana. No paso muchos días en mi casa porque viajamos mucho, pero esto seria un día normal en mi vida. 

 

FJ: ¿Cuál es tu mayor sueño? 

TC: Ser piloto oficial de F1. 

 

FJ: ¿Cómo es ser piloto mujer en una industria dominada por hombres? 

TC: No ha sido fácil romper con los estereotipos y ganarse el respeto, tanto de mis competidores como de mi propio equipo, los ingenieros, mecánicos, jefes de equipo. Es un gran desafío, porque incluso hoy en día hay muchas cosas que están diseñadas más para hombres que para nosotras; pero como hay un auto de por medio, es de los pocos deportes donde podemos competir mano a mano. Espero que cada vez haya más mujeres en este deporte, para que sea más normal que compitamos al más alto nivel. 

 

FJ: ¿Cuál a sido tu mayor reto como mujer? ¿Crees que tu sexo ha troncado tu carrera profesional? 

TC: Creo que, como en todo, tienes ventajas y desventajas de ser mujer. Pero el reto más grande es poder contar con las oportunidades para demostrar que podemos ser tan competitivas como cualquier hombre. En el automovilismo necesitas tener el mejor carro para poder ganar o estar en uno de los mejores equipos y normalmente no nos dan esas oportunidades por falta de credibilidad. 

 

FJ: ¿Has tenido alguna situación incomoda por ser mujer? ¿Te han tratado diferente los otros pilotos? 

TC: Siempre empiezan tratándote diferente; te subestiman y les sorprende mucho cuando eres tan rápida como los demás. Varias veces me han dicho que para ser mujer voy bastante rápido o que si de verdad soy una niña, porque es imposible que les gane a los mejores. Estos comentarios son los que alimentan mi motivación y me dicen que voy por el camino correcto. 

 

FJ: El automovilismo es un deporte de alto riesgo ¿Has temido alguna vez por tu vida? ¿Cómo recuerdas a Anthoine Hubert? 

TC: Creo que hasta ese día no me había dado cuenta del riesgo que conlleva estar arriba de un carro de carreras. Sin duda mi percepción del deporte cambio, tengo mucho más respeto por lo que hago y por mis rivales en la pista, pero nunca miedo a hacerme daño. El día que sienta miedo creo que tendría que plantearme hacer algo diferente. A Huber lo recuerdo como un ejemplo de persona y de piloto; muy talentoso, trabajador, sencillo y con una familia muy bonita y unida. Aprendí mucho de él y de toda la situación por la que pasamos. 

 

FJ: ¿Qué le dirías a los jóvenes pilotos que están iniciando su carrera deportiva en el kartismo? 

TC: Que nada es imposible, que uno tiene que soñar en grande e ir a perseguir eso que quiere alcanzar. Les diría que tiene que ser pacientes y que el camino no va a ser fácil, si fuera fácil cualquiera lo haría, pero que vale mucho la pena cuando uno encuentra su verdadera pasión.