EN EL SEXTO
“Crean en ustedes mismos y en sus capacidades"
Perspectivas de la enseñanza del derecho y el estudio en el exterior, con Esteban Pardo
Foro Javeriano tuvo el honor de conocer un poco sobre la vida de Esteban Pardo Lanzetta, docente y abogado Uniandino, admitido para la práctica en Colombia y en el Estado de Nueva York. Hablamos de su vida, experiencias y perspectivas del derecho.
Archivo: Archivo personal Esteban Pardo
Por: David Alejandro Cáceres Guerrero y Valeria Reyes Otálora
El doctor Esteban Pardo Lanzetta es abogado de la Universidad de los Andes y es socio de la firma Salazar, Pardo & Jaramillo. Tuvimos la oportunidad de reunirnos con él, en el sexto piso de nuestra facultad, haciéndole honor al nombre de esta sección. Conversamos sobre la experiencia de estudiar en el exterior y los métodos de enseñanza del derecho actualmente. Les contamos a continuación nuestras reflexiones y los detalles de la charla.
Como no podía ser de otra manera, iniciamos preguntándole por su elección del Derecho como área en el que desarrollar su vida profesional. Nos contó que empezó estudiando Economía, sin embargo, en segundo semestre se dio cuenta que por ahí no iba la cosa, hecho que lo llevó a inscribir algunas materias de Derecho. Tiempo después terminaría transfiriéndose totalmente de programa. Posteriormente, haría, también en los Andes, una especialización en Derecho de los Negocios Internacionales. Sobre esto último, recomienda que al momento de elegir un posgrado el mismo sea altamente reconocido y, en lo posible, conviene explorar universidades diferentes a la del pregrado, con el objetivo de ampliar el espectro en técnicas de enseñanzas y aprendizaje, al tiempo que conocer distintos profesores y compañeros de estudio.
Adentrándonos en su experiencia académica en el exterior, el Dr. Pardo se fue con 29 años a hacer un LLM en la Universidad de Columbia. Siempre tuvo claro que su intención era irse a la ciudad de Nueva York, pues desde pequeño le había gustado y llamado la atención. Su proceso de aplicación, limitado por el ámbito territorial ya mencionado, llevó a que sus opciones fueran NYU y la Universidad de Columbia, escogiendo esta última por pertenecer a la Ivy League. Se fue con apoyo del crédito de COLFUTURO, que, como ya hemos contado en Foro Javeriano, ha ayudado a muchos de nuestros profesores.
Nos comenta que la diferencia entre estudiar en Colombia y Estados Unidos es grande; empezando, simplemente, por el idioma. El inicio de estudios en derecho, en dicho país, es un posgrado, la inversión económica es considerable y el nivel de exigencia es superior (teniendo en cuenta que ya los estudiantes de derecho cuentan todos con un pregrado). Fuera de estas diferencias generales, en términos materiales, nos cuenta, desde su experiencia, que tenía cuatro clases que no superaban las 16 horas a la semana. Uno pensaría que dicha extensión horaria daría espacio para el aprovechamiento de otras áreas de la vida. No obstante, la carga de investigación y lectura es muy alta; quien quiere sacarle verdadero provecho debe dedicarse enfocadamente. Quien quiera disfrutar el ambiente de fiesta y de intercambio cultural también lo puede hacer, aunque la experiencia académica no será la misma. Cuenta que es muy difícil perder una materia pues el sistema de calificación es de curva, como también lo es obtener resultados destacados. Dada la dedicación del Dr. Pardo, se graduó con honores del programa de Maestría en Derecho. Su recomendación es hacer un estudio juicioso con el ánimo de determinar cuál es el mejor programa que se ajuste a las necesidades y posibilidades de cada uno. Al respecto, señaló que los costos de estudio en Estados Unidos son muy similares en todas las Universidades, por lo que el esfuerzo económico y en tiempo deben dirigirse a las Facultades de mayor nombre y acreditación.
En otra arista de su vida, el doctor Pardo, es abogado certificado en el Estado de Nueva York, hecho que no dejaba de generarnos curiosidad y que nos compelió a preguntarle sobre su experiencia. Con la concreción que lo caracteriza, nos esbozó el proceso general de aplicación a la abogacía en los Estados Unidos.
Para efectos de calificarse como abogado en Estados Unidos, primero deben verificarse los requisitos exigidos por cada Estado para determinar si se encuentra permitido que a abogados calificados en otras jurisdicciones, se les permita toma el respectivo examen de la Barra. En el momento en que el Dr. Pardo se calificó como abogado del Estado de Nueva York, solamente éste y el Estado de California lo permitían.
Determinado lo anterior, lo primero que debe tenerse en cuenta es el cumplimiento de cursar y aprobar un mínimo de créditos en derecho estadounidense. Posteriormente, se presenta la solicitud ante la Barra del Estado escogido y le responden positiva o negativamente la petición. Acto seguido, viene el núcleo del asunto: los exámenes. Por un lado, está el de ética que es de selección múltiple; el Dr. Pardo destaca que los estadounidenses le dan una importancia mayúscula a los temas de ética y rectitud para la calificación como abogado en esa jurisdicción. Por otro lado, está el examen teórico que se divide en dos componentes: el primero, relacionado con ley federal general que consiste en un examen de opción múltiple; el segundo, atinente a la ley estatal y sus procedimientos generales (una parte de selección múltiple y otra a manera de ensayos escritos).
Luego de haber superado satisfactoriamente los exámenes, procede la aplicación, propiamente dicha, que consiste en llenar un formulario y presentar recomendaciones de abogados que estén en la Barra, para después presentarse a una entrevista personal.
Cambiando de tema drásticamente, le preguntamos sobre su experiencia dictando clase en la Javeriana, pues su asignatura es muy conocida por su particular técnica de enseñanza que busca que el estudiante llegue por sí mismo al conocimiento. Lleva aproximadamente de 13 años vinculado a esta casa de estudios y nos comentó que cuando llegó, nunca había dictado clase, razón por la que decidió utilizar el método que conocía, que se basa, de manera esencial, en la preparación que el estudiante hace para sesión. Nos expuso una reflexión muy interesante, que nosotros personalmente compartimos: considera que el profesor debe ser una guía, teniendo siempre un trato deferente, educado y cortés con el estudiante, conservando siempre el respeto entre ambas partes; la amabilidad es innegociable. El ser profesor le ha dejado gratas experiencias, donde destaca, sobre todo, conocer a sus estudiantes. Cuenta una anécdota curiosa y es que en un proceso ante la SIC que le estaba ayudando a llevar a un familiar, se encontró con que la contraparte habían sido estudiantes suyos. Como bien enseña en sus clases, es mejor siempre llevar todo bien preparado. Los vio y les dijo que tenía sus alegatos listos, a lo que le respondieron “acá están los nuestros también”. Fue, para él, una experiencia muy gratificante pues encontró que sus recomendaciones y enseñanzas han tenido eco.
El doctor Pardo es una persona muy amable, es cálido y respetuoso en el trato. Nos hizo énfasis en que, para él, hacer sentir mal a un estudiante no tiene ningún sentido. Tiene claro que lo que trasciende son las relaciones y las personas, pues eso es lo que al final queda. Al pedirle un consejo para quienes nos estamos formando en el arte jurídico, no dudó en decirnos que la integridad es clave. Esta, como valor universal, implica hacer las cosas bien, ser juiciosos, no poner nuestro nombre es riesgo, etc. El resto es esfuerzo, compromiso, y no podemos negar que la suerte también juega su papel si se sabe aprovechar.
Le agradecemos al doctor Esteban Pardo por concedernos el espacio de sentarnos a hablar con él sobre estos temas. Así mismo, por enseñarnos que las clases magistrales no son el único método existente, sino que nosotros, como estudiantes, también podemos llegar al conocimiento por nuestros medios, preparándonos así para el estudio de una carrera que solo acaba el día que dejemos de ejercerla. Para finalizar, no podemos cerrar con algo diferente a la reflexión que suele hacernos transversalmente en su clase: “crean en ustedes mismos y en sus capacidades".