FORO JAVERIANO

Foro Javeriano: Cuéntenos un poco sobre el proyecto de Colomb!anas 

 

Daniela Díaz: Colomb!anas es un programa que hace parte de la Fundación Alvaralice. La Fundación Alvaralice es una fundación familiar que nace en el 2003 buscando continuar con el legado de intervención y transformación social de Álvaro Garcés y Alice Echavarría, quienes fueron dos personas que le buscaron apostar al bienestar de la ciudad. Al bienestar de la ciudad a partir de proyectos sociales. De esta manera una de las hijas, fundadora de Alvaralice, es la autora de un libro que se llama "Las mujeres colombianas: Su lucha por romper el silencio”. Ella es una de las primeras mujeres feministas vallecaucanas. Ella va a hacer un doctorado en el exterior y es una tesis doctoral la que da el nombre a este proyecto. Ella realiza una serie de entrevistas a diversas mujeres del país y lo que encuentra, que es común a ellas, es que las mujeres logran establecer transformaciones personales y sociales cuando son ellas quienes cuentan su propia historia y cuando son ellas mismas quienes se atreven a romper el silencio de algunas acciones o sucesos que han acontecido en sus vidas. Es un libro que le permite a las mujeres adquirir mayor seguridad y tener mayor convicción de que sus relatos y sucesos son valiosos. A partir de este libro nace una nueva generación de esta familia liderada por Enrique Eder, que es uno de los nietos de esta generación, el cual, busca rendirle un homenaje a este libro por medio de un documental y resulta que ese documental se transforma en demasiada información. Son tantas las cosas que hay que contar y tantos relatos que tienen las mujeres que un documental no hubiera captado todo esto. Lo que hacen es crear una primera fase Colomb!anas como una plataforma multimedia donde conviven y dialogan diversos relatos de mujeres alrededor del país. Estos relatos están catalogados en categorías y lo que permiten es establecer unos temas comunes a las mujeres, a pesar de su diversidad de creencias, de su diversidad étnica o de su diversidad social. Se encuentra que hay aspectos comunes que compartimos las mujeres. Actualmente, el programa está desde 2017 y ha tenido transformaciones acordes a lo que se espera que suceda en estos programas que es precisamente ese diálogo social. Ahorita hay más de 100 relatos de mujeres que están en la plataforma y funciona de esta manera: es un programa que busca generar un diálogo social respecto a las cuestiones comunes en medio de la diferencia sobre lo que es ser una mujer colombiana. 

 

FJ: ¿Podría contarnos un poco sobre la importancia de desarrollar y respaldar proyectos orientados a las mujeres colombianas?  

 

DD: Lo que hemos encontrado dentro de la historia de esta plataforma y del programa es que por muchos factores personales, familiares y comunitarios las mujeres buscamos a veces otras voces que no son las propias, lo cual, hace que tengamos relatos que no son los propios; que pongan palabras sobre nosotras que no son realmente las que queremos decir. Esto ha sido significativo porque hemos encontrado que, a partir de contar historias comunes y cotidianas, de mujeres comunes y cotidianas, se ha llevado a un diálogo mucho más nutrido, mucho más conjunto y mucho más auténtico. Entonces la importancia que tiene este programa, para las mujeres, es que permite generar una conexión y una interrelación en medio de la diferencia de aspectos comunes que nos suceden a las mujeres colombianas en el país, independiente de nuestras creencias, de nuestra etnia y de nuestra clase social. Todas hemos compartido en algún momento historias conjuntas que son las que vale la pena narrar con nuestra propia voz, más no ser narradas por otros.  

 

FJ: ¿Podría contarnos un poco sobre cómo los manifiestos de mujeres colombianas pueden apoyar y hacer un cambio en el país?  

 

DD: Hemos encontrado algo muy valioso al tener estos relatos montados en esta plataforma y difundidos por medio de redes y es que permiten, por un lado, remembrar historias que tal vez hemos guardado por ser muy difíciles o por tener que tener otras historias. Entonces, por un lado, es la remembranza y la memoria de tener una memoria común y colectiva de lo que ha sido y lo que ha significado ser mujer en el país y, por otro lado, estos manifiestos permiten generar mecanismos para liberar y para poder conversar de una manera mucho más honesta y auténtica. Inicialmente, se buscó tener como mucho bagaje en medio de los testimonios entonces tenemos desde actrices reconocidas, modelos, líderes sociales, y mujeres indígenas, hasta, mujeres afro. En medio de contar con toda esta diversidad hemos podido establecer un diálogo mucho más general que no atraviese tantas esferas académicas y que no atraviese tantas esferas de planeación, sino que, sea un diálogo mucho más cercano entre las mujeres que acceden a estos videos, y las mujeres que puedan interactuar por medio de nuestras redes sociales. Esto nos ha permitido que las mujeres decidan contar su historia a partir de escuchar la de las demás.  

 

FJ: Ustedes plantean la idea de que no existen historias más relevantes que otras, ¿nos podría contar un poco más sobre esta idea? 

 

DD: Claro, nosotras conocemos la importancia del lugar de enunciación, es decir, conocemos la importancia de la mujer que anuncia la historia, por ejemplo, que lo anuncie una mujer muy reconocida a una que no ha sido reconocida públicamente. Sin embargo, pensamos que ese reconocimiento no actúa sobre realmente lo que es el relato y la memoria. Es decir, tú podrías cambiar el rostro de la mujer que habla o que anuncia y esa historia sería valiosa por sí sola. La idea de colombianas es también darles cara a las palabras, porque vivimos en un país que presenta unos retos a nivel de seguridad. Igualmente, a nivel de debate es importante, no somos un país tan abierto al debate y a conocer la diversidad de los puntos de vista, entonces es difícil. Por eso mismo, creemos que es importante que no importe el rostro o la mujer que tenga ese rostro, sino que esas historias podrían nutrir esa biografía de una manera mucho más amplia que no compitan unas con otras. Que muestren y compartan la importancia de que es el relato y que el relato es lo que construye, no la cara o la mujer que lo denuncie necesariamente. 

 

FJ: ¿Qué reto se les ha presentado en el proyecto? 

 

DD: Hemos tenido situaciones con algunas mujeres. Algunas de las cápsulas se firmaron en 2016 y 2017 que era justo la época del proceso de paz y de negociación con las Farc. Hubo algunas mujeres que recibieron amenazas por parte de grupos de incidentes y es su relato el que el que está haciendo memoria de la experiencia de ser una mujer desmovilizada. Nos hemos enfrentado también a tener que ser muy responsables con la información que decidimos compartir y a comprender que a pesar de la apuesta y el objetivo que buscamos, por medio del programa, también debemos ser cada vez más responsables y tener mayor comprensión del país en el que vivimos. Por más mediático y audiovisual que sea el programa, sí responde a unas condiciones sociales específicas que nos presentan unos retos importantes para la seguridad de las mujeres. Esto nos enfrenta a cómo ser un programa que vele por la seguridad digital de las usuarias y por ende como un programa cada vez más responsable, que no sea el problema sino precisamente que brinde seguridad para enfrentarlos conjuntamente.  

 

FJ: Colomb!anas es uno de los proyectos en el país que están enfocados en trabajar por el empoderamiento de la mujer, desde su perspectiva y su conocimiento, ¿cuáles son algunas de las batallas de las mujeres hoy en día? ¿Podría contarnos un poco más sobre ellas y que se está haciendo al respecto? 

 

DD: Pues sí, digamos que, desde Colomb!anas, el principal reto es el tema de la seguridad digital que lo hemos evidenciado también en un entorno internacional y multilateral que es precisamente donde se está brindando cada vez más apoyo a fundaciones organizaciones sociales y de base comunitario para proteger todo el tema de difusión de derechos sexuales y reproductivos. El tema de la exposición en redes sociales es un reto importante en Colombia, pues si bien, hay organizaciones trabajando o programas que están apuntándole a esto, si nos demanda una mayor responsabilidad y mucho más detenimiento en cómo poder hacer de nuestros medios un espacio seguro para las mujeres y un espacio de confianza. Otro reto al que se enfrentan las mujeres en el entorno digital, pero también en el entorno social, es todo el tema del empoderamiento mucho más enfocado en la aceptación del cuerpo más que en el desarrollo de capacidades y virtudes o potencias que uno tiene para explorar. Desde Colomb!anas hemos buscado que el diálogo no termine en este self-love y en el empoderamiento; hemos buscado consolidar realmente estrategias propias que les brinden a las mujeres mayor autonomía y una mayor reconciliación con lo que ha sido su historia de vida y su proceso. Que no está mal hablar no está mal pensar diferente y no está mal ser diferente. 

 

FJ: Como mujeres, ¿qué podemos hacer en nuestro día a día para apoyar y hacer un cambio por las mujeres colombianas? 

 

DD: Desde el programa las invitaríamos a establecer formas de contar lo que nos ocurre y quisiéramos que las mujeres cada vez fueran más dueñas de sus relatos y de sus palabras. Ahorita, en una sociedad que nos obliga a querernos, que hace de nuestros cuerpos como unos lugares para amarnos, más no de nuestra historia y nuestro pensamiento. Es revolucionario y cada vez viene con más fortaleza; el tema de saber quiénes somos es saber qué nos ha ocurrido. Eso que nos ha ocurrido es valioso porque tiene la autenticidad de nuestras palabras qué es un reto. Ahí está precisamente el cambio de cómo hacer de los recuerdos algo más propio que les permita a las mujeres cada vez más ser dueñas de su historia y permitir a otras mujeres hablar para tener ahí algo lindo. No solo lindo sino algo importante, que las mujeres que se atreven y que cuentan su historia siempre son un camino para que otras mujeres lo hagan y eso es realmente lo importante porque servimos de inspiración. Nuestra historia inspira a otras a que la cuenten y nuestra historia permite que otras mujeres se encuentren en nuestras palabras; un lugar desde donde poder iniciar un proceso de cambio y transformación. 

 

Entrevista completa disponible en nuestro canal de Spotify.